XYZ es un combinado abierto y dinámico que se une para generar proyectos para concursos. Su proyecto “Agora” salió electo por el jurado de profesionales, electo a la vez por los concursantes, luego de un debate complejísimo. “Agora” se fundamenta en tres aspectos básicos: el cambio de imagen del colegio (darle una imagen); la comunicación visual desde el frente al patio intermedio y la capacidad de que en el edificio se realicen diferentes actividades simultáneas sin que unas interfieran con las otras.
_ ¿Qué fue lo primero que pensaron en cambiar del actual colegio?
_ Los parasoles (se ríen y el grupo hace alguna referencia a ese aspecto muy 80´s de la fachada). Dentro de las cosas que había para hacer, un aspecto fuerte es el cambio de imagen y la idea no tiene que ver tanto con los parasoles sino con hacer saber que «acá está el Colegio de Arquitectos”, explica Mauro Cucatto.
_ Que se vea y se sepa que es el Colegio de Arquitectos…
_” … Claro, si bien el cerramiento actual cumple con la función de regulación climática, entendíamos que debía cumplir con una función en cuanto a imagen”, señala Carmen Paz.
_ “Los parasoles fue lo primero que nos impactó sobre todo al imponernos la idea de continuidad visual desde el frente hasta el patio interior” dice Florencia Allende.
_ “¿Cómo es eso?”
_ “Uno de los ejes del proyecto es integrar el patio interior, que pocos edificios cuentan con uno, con el funcionamiento normal del Colegio”; nos dice Lisandro Riva. “Al estar en el centro es el espacio que hace de mediador entre la parte de atrás (en el que se desarrollan actividades y capacitaciones) y la parte de adelante (de atención al público) e incorporar el patio trasero, que nos sorprendió cuando apareció porque no lo conocíamos” y agrega ”entonces se estableció una relación entre el frente y el rediseño sobre el espacio público, el patio intermedio y el patio interior.”
_ “Tengamos en cuenta que estábamos trabajando con una estructura rígida y teníamos que adaptarla y adaptarnos”; apunta Jeremías Lupica; “…habían límites preestablecidos”,
_ “Sí… Potenciar lo que teníamos a partir de la relación con los patios”, define Lisandro.

“Uno de los ejes del proyecto es integrar el patio interior, que pocos edificios cuentan con uno, con el funcionamiento normal del Colegio”

_ De las exigencias del proyecto, ¿qué fue lo primero que les llamó la atención?
_ “Las bases no eran rígidas. Como estaban planteadas y como nosotros las entendimos la clave es el uso de los ambientes y su interacción sobre un núcleo duro de servicios sin interferirse entre ellos”.
_ “Con el núcleo de servicios y con la escalera también. Fue importante a la hora de rediseñar los espacios la relación con el semipiso” agrega Florencia.
_ «Buscamos espacios francos según los cuales dos núcleos duros (servicios y escalera) no interfieran en un cambio de uso en el futuro”, define Lisandro.
_ ¿Una posible reorganización?
_” ¡¡¡Claro!!! (casi al unísono). Es una clave en estos programas institucionales; el uso múltiple de los espacios.”
_ “… que se puedan hacer distintas actividades simultáneas a la vez sin que el uso de los núcleos interfiera alguna de esas actividades” explica Florencia.
_ ¿Cuánto es el plazo de ejecución?
_ “Hay muchas variables… y una importante es interferir lo menos posible en el funcionamiento del colegio. Calculamos unos cinco meses”
_ “Hablábamos con Diego (Diego Lopez de Murillas) y hay una primera etapa de gestión municipal, de ajustar el proyecto a las exigencias municipales.”
Le preguntamos al grupo sobre la impresión de los otros proyectos concursantes y entre risas nos explicaron cómo veían soluciones que a ellos no se les habían ocurrido: un beneficio residual del concurso como herramienta de elección de proyectos es ese caudal de ideas que se comparte.
_”Veíamos cosas muy parecidas pero a la vez soluciones muy diversas en distintos aspectos. Está re bueno ver cómo a otros equipos se les ocurren otras soluciones” nos dice Carmen.

La dinámica de grupo es un aspecto siempre delicado y más para los profesionales de la arquitectura. Los diseñadores de “Agora” tienen una aproximación naïve a esa dinámica, en el buen sentido de la palabra. “Nos conocemos de la facultad y somos amigos. Nos metimos en el concurso con ánimo de divertirnos. En algún momento querés matar a alguno (se ríen). Son noches que pasás de largo y por ahí te falta una cosa…”; y definen una realidad que los arquitectos conocen perfectamente. ”Pero en estos dos meses que estuvimos con el proyecto generamos una cosa de familia que cuando no está la extrañamos” y ejemplifican los buenos momentos compartidos que intervalan el trabajo como las cenas y almuerzos (hay buenos cocineros en el grupo y todo apunta a los fideos caseros de Jeremías y los ñoquis de Florencia). No dejan de señalar debates duros que son los que hacen a la riqueza del grupo y generan ideas nuevas.

«Buscamos espacios francos según los cuales dos núcleos duros (servicios y escalera) no interfieran en un cambio de uso en el futuro”, define Lisandro.